Recomendaciones nutricionales tras una cirugía de la obesidad

Una buena alimentación es fundamental para el éxito de una cirugía bariátrica. Los pacientes que sigan correctamente las pautas recomendadas por su nutricionista, no solo perderán peso, sino que podrán mantenerlo a largo plazo. 

Laia Fontané. Diestista- Nutricionista. Servicio de Endocrinología y Nutrición.

Si recientemente has pasado por quirófano o estás próximo a someterte a una bariátrica es normal que surjan dudas sobre cómo cambiará tu alimentación de ahora en adelante. Por eso, preguntamos a la especialista en Nutrición y Endocrinología, Laia Fontané qué modificaciones deberán hacer los pacientes en su dieta tras una cirugía.  

Es importante que los pacientes visiten a un nutricionista antes del proceso para comenzar la pérdida de peso. Previo a la cirugía, concretamente siete días antes, el paciente debe seguir una dieta muy estricta baja en calorías con suplementación nutricional. Cabe destacar que estas dietas siempre deben ser bajo petición y supervisión de un profesional, por ninguna razón se debe hacer una dieta preoperatoria por cuenta propia.   

La nutricionista Laia Fontané, nos indicó que durante las primeras semanas después de la intervención el paciente debe seguir una dieta progresiva. Es decir, las dos primeras semanas se hace una dieta líquida con suplementación nutricional, a partir de la segunda y tercera semana se hace una dieta fácil de digerir de textura triturada y a partir del mes se empieza a incorporar alimentos sólidos, aunque sigue siendo de fácil digestión. Durante estas semanas es importante evitar alimentos ricos en grasa, fibra y siguiendo recomendaciones de una dieta baja en calorías. 

«La dieta a largo plazo sería una dieta baja en calorías, evitando alimentos con mucha carga de azúcar y grasas. Para conseguir la perdida de peso y el mantenimiento de la misma. «

Los pacientes deben tener en cuenta que uno de los objetivos de la cirugía bariátrica es que quepa poco alimento en el estómago, por lo tanto, las porciones de sus comidas van a ser mucho más reducidas. Fontané resalta que si los pacientes van aumentando la cantidad de comida a largo plazo el estómago se puede dilatar y nuevamente pueda caber un volumen alto de comida. Lo cual, traería consecuencias como: recuperar el peso perdido, el aumento de riesgo cardiovascular, e incluso un déficit nutricional. 

En conclusión, la dieta es esencial para el éxito de una cirugía bariátrica. Siempre y cuando esta se haga correctamente bajo la supervisión de un nutricionista y de la mano con actividad física.