Beneficios de la cirugía bariátrica demostrados científicamente: la reducción del riesgo cardiovascular

 

Autor: David Benaiges

 

En esta serie de artículos nuestro endocrinólogo David Benaiges nos explica en un lenguaje fácilmente comprensible trabajos científicos en los que ha participado.  En ellos se demuestra en que se puede beneficiar la salud de una persona con obesidad que se interviene de cirugía bariátrica. 

La obesidad es una enfermedad que se define por el exceso de acumulo de grasa que es perjudicial para nuestra salud. Actualmente sabemos que las personas con obesidad tienen múltiples problemas de salud asociados que afectan a su calidad de vida. Además de vivir peor, las personas con obesidad tienen una menor esperanza de vida que se debe en gran parte a una mayor mortalidad cardiovascular (es decir más muertes causadas principalmente por infartos de corazón y accidentes vasculares cerebrales) y por cáncer. Desde hace décadas se han desarrollado unas herramientas que nos permiten estimar cuál es el riesgo cardiovascular que tiene una persona en función de varios parámetros. La más conocida es la de Framingham (https://www.framinghamheartstudy.org/fhs-risk-functions/cardiovascular-disease-10-year-risk/). De una forma sencilla si introducimos en la calculadora la edad, el género, la presencia o no de diabetes, el tabaquismo, las cifras de tensión arterial, de colesterol total y de colesterol HDL (colesterol bueno) obtenemos probabilidad de padecer un evento cardiovascular en los próximos 10 años. 

En un estudio publicado en la prestigiosa revista Surgery for Obesity and Related  Diseases (10.1016/j.soard.2011.03.002)  se estudió cómo se veía modificado este riesgo cardiovascular un año después la cirugía bariátrica en 140 personas con obesidad grave.  Antes de la operación los pacientes tenían un riesgo cardiovascular medio del 6.6%, es decir se podía estimar que 9 de los 140 sujetos sufrirían un infarto o un ICTUS en los siguientes 10 años. Un año después de la intervención este riesgo cardiovascular se redujo drásticamente hasta al 3.4%, es decir disminuyó hasta prácticamente a la mitad. Tras un análisis más exhaustivo se comprobó que la mejoría del riesgo cardiovascular se podía explicar por la normalización de los niveles de azúcar en las personas con diabetes, la mejoría de las cifras de colesterol y la normalización de tensión arterial tras la cirugía bariátrica. Además no se observaron diferencias entre las dos técnicas empleadas: el bypass gástrico y la gastrectomía tubular o en manga.

En concordancia, un estudio realizado en Suecia y que incluía miles de pacientes con obesidad grave mostró que tras catorce años de seguimiento, aquellos sujetos operados de cirugía de la obesidad tenían una menor mortalidad de causa cardiovascular que aquellos que no se operaron (10.1001/jama.2011.1914). Finalmente, podemos concluir que las personas con obesidad grave que se someten a una cirugía bariátrica además de vivir mejor (más calidad de vida) también viven más años (más esperanza de vida).